463 millones de personas sufren diabetes alrededor del mundo, según la International Diabetes Federation (IDF), y se estima que 700 millones de personas vivirán con diabetes en 2045. En este sentido, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha informado que las muertes por diabetes aumentaron en un 70 % a nivel mundial entre los años 2000 y 2019.

Se trata de cifras que confirman que la diabetes, aunque se puede prevenir, es ya una de las epidemias del siglo XXI, además de un problema sanitario grave de alcance mundial por su prevalencia, su coste económico y el número de muertes que provoca debido a las complicaciones que se pueden derivar…. y lo que es peor, que va a más.

En este sentido, la IDF ha confirmado que la diabetes causó 4,2 millones de muertes en 2019, ha reclamado a los gobiernos su implicación, y ha habilitado una app específica, que se puede descargar de forma gratuita, para hacerse un selfie junto con el círculo azul, símbolo de la diabetes, y compartirlo en las redes sociales con la etiqueta #SiNoAhoraCuando.

A pesar de estas cifras, cada vez más alarmantes, queda lugar para el optimismo ya que las personas diabéticas pueden vivir mucho tiempo y con buena salud si la enfermedad se detecta y se trata correctamente. En este sentido, la IDF estima que 700 millones de personas vivirán con diabetes en 2045; lo que según la Fundación para la Diabetes, supone que un 13,8 % de los españoles sufre esta enfermedad, lo que equivale a más de 5,3 millones de personas, pero lo más importante es que el 50 % de estos casos pueden prevenirse.

La diabetes tipo 2 es la más habitual, suele manifestarse a partir de los 40-45 años, de manera progresiva, por lo que puede pasar desapercibida durante bastante tiempo, algo que dificulta el diagnóstico y el tratamiento precoces. De hecho, la International Diabetes Federation afirma que una de cada dos personas con diabetes todavía no está diagnosticada.

Comentarios de Facebook
También puede interesarte:  Estudios demuestra que el COVID-19 puede deteriorar la salud del paciente diabético